Mi madre debió acostarse con todos los poetas
Dejar que las erecciones versificadas
de aquellos que eyaculan poesía
amuraran su uteropapelenblanco.
Mi madre debió besar la boca de todas las poetisas.
Dejar que los labios de azahares
De aquellas que menstrúan palabrasrubies
Lamieran sus pechos ya en leche.
Solo así hubiera parido un Poeta entre poetas
y no esta beata mortaja tartamuda y doliente.
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